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El bautismo de Jesús
Mateo 3:16
Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él.Texto completo de la biblia
Mateo 3:13-17
Entonces Jesús vino de Galilea a Juan al Jordán, para ser bautizado por él. Mas Juan se le oponía, diciendo: Yo necesito ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a mí? Pero Jesús le respondió: Deja ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia. Entonces le dejó. Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él. Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia.
Entonces Jesús vino de Galilea a Juan al Jordán, para ser bautizado por él. Mas Juan se le oponía, diciendo: Yo necesito ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a mí? Pero Jesús le respondió: Deja ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia. Entonces le dejó. Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él. Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia.
Más sobre este cuadro
Juan el Bautista fue el precursor, el heraldo del Rey Jesús. Su trabajo era preparar a la gente para la venida de Jesús.
Como profeta, Juan pregona que el Rey se acerca. Y que para ser arrebatados a Su reino se requiere arrepentimiento y renovación del corazón.
Él bautiza a los que confiesan sus pecados y quieren alejarse de ellos en el río Jordán como señal de su purificación.
Cuando Jesús tiene unos treinta años, viene al Jordán para ser bautizado por Juan. Juan se niega al principio, porque sabe que Jesús no necesita conversión, ni purificación.
El hecho de que Jesús, sin embargo, quiera ser bautizado muestra que Él quiere cumplir con todos los estatutos de Dios. Gálatas 4, versículo 4.
Él “cumplió toda justicia”.
Él que "no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado".
2 Corintios 5, versículo 21.
Así que el bautismo fue humillante para Jesús. Después de ser bautizado, el Espíritu Santo desciende sobre Jesús en forma de paloma, y la voz de Dios Padre habla:
"¡Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia!"
Compare el Salmo 2, versículo 7.
La unción con el Espíritu Santo significa el equipamiento del Mesías para la obra del 'Siervo del SEÑOR'.
Véase Isaías 42.
La paloma que regresó a Noé en Génesis 8 fue una señal del fin del juicio y el comienzo de una nueva era.
Así, la paloma en este bautismo es una señal de salvación del juicio venidero.
‘El reino de los cielos se ha acercado’.
Mateo 3, versículo 2.
Mateo 4, versículo 17.
Jesús fue circuncidado cuando tenía ocho días.
Lucas 2, versículo 21.
A través de su bautismo, Jesús cumplió Su circuncisión. La circuncisión era la señal y el sello del pacto con Dios.
Este pacto continúa y llega a su forma cumplida en el 'Reino de Dios'.
Por ejemplo, así como la Pascua del Antiguo Testamento llegó a su cumplimiento, es decir, a su forma real en la Santa Cena del Nuevo Testamento, así también la señal del pacto de la circuncisión ha llegado a su forma adecuada en el "Bautismo del Reino".
El bautismo es signo y sello de pertenencia al Reino.
Isaías 42, versículo 1:
‘He aquí mi Siervo, a quien yo sostendré,
Mi Elegido, en quien Mi alma se complace;
He puesto Mi Espíritu sobre Él.
Él traerá justicia a las naciones’.
Mateo 17, versículo 5:
‘Mientras él aún hablaba, he aquí, una nube brillante los cubrió; y he aquí, una voz desde la nube decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia; ¡Escúchalo a él!’
Colosenses 1, versículo 13:
‘Él nos ha sacado del poder de las tinieblas y nos ha trasladado al Reino del Hijo de Su amor’.
Como profeta, Juan pregona que el Rey se acerca. Y que para ser arrebatados a Su reino se requiere arrepentimiento y renovación del corazón.
Él bautiza a los que confiesan sus pecados y quieren alejarse de ellos en el río Jordán como señal de su purificación.
Cuando Jesús tiene unos treinta años, viene al Jordán para ser bautizado por Juan. Juan se niega al principio, porque sabe que Jesús no necesita conversión, ni purificación.
El hecho de que Jesús, sin embargo, quiera ser bautizado muestra que Él quiere cumplir con todos los estatutos de Dios. Gálatas 4, versículo 4.
Él “cumplió toda justicia”.
Él que "no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado".
2 Corintios 5, versículo 21.
Así que el bautismo fue humillante para Jesús. Después de ser bautizado, el Espíritu Santo desciende sobre Jesús en forma de paloma, y la voz de Dios Padre habla:
"¡Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia!"
Compare el Salmo 2, versículo 7.
La unción con el Espíritu Santo significa el equipamiento del Mesías para la obra del 'Siervo del SEÑOR'.
Véase Isaías 42.
La paloma que regresó a Noé en Génesis 8 fue una señal del fin del juicio y el comienzo de una nueva era.
Así, la paloma en este bautismo es una señal de salvación del juicio venidero.
‘El reino de los cielos se ha acercado’.
Mateo 3, versículo 2.
Mateo 4, versículo 17.
Jesús fue circuncidado cuando tenía ocho días.
Lucas 2, versículo 21.
A través de su bautismo, Jesús cumplió Su circuncisión. La circuncisión era la señal y el sello del pacto con Dios.
Este pacto continúa y llega a su forma cumplida en el 'Reino de Dios'.
Por ejemplo, así como la Pascua del Antiguo Testamento llegó a su cumplimiento, es decir, a su forma real en la Santa Cena del Nuevo Testamento, así también la señal del pacto de la circuncisión ha llegado a su forma adecuada en el "Bautismo del Reino".
El bautismo es signo y sello de pertenencia al Reino.
Isaías 42, versículo 1:
‘He aquí mi Siervo, a quien yo sostendré,
Mi Elegido, en quien Mi alma se complace;
He puesto Mi Espíritu sobre Él.
Él traerá justicia a las naciones’.
Mateo 17, versículo 5:
‘Mientras él aún hablaba, he aquí, una nube brillante los cubrió; y he aquí, una voz desde la nube decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia; ¡Escúchalo a él!’
Colosenses 1, versículo 13:
‘Él nos ha sacado del poder de las tinieblas y nos ha trasladado al Reino del Hijo de Su amor’.