Ciclo vital de Jan van 't Hoff
Nacido en 1959 en Oosterland, Países Bajos, y criado en una familia cristiana. Ya durante mi infancia se vio que tenía talento para el dibujo. Durante el período de la escuela secundaria mi profesor de arte hizo mucho para desarrollar ese talento. Me enseñó a trabajar con pintura al óleo.
En 1976 inicié el curso de formación de profesores de TeHaTex en Tilburg. Dos años más tarde me inscribí como estudiante en la Academia Cristiana para la Educación en Artes Visuales, recientemente establecida en Kampen. Terminé mis estudios en 1983. Al año siguiente me mudé a Rotterdam y en 1986 me casé con Loes Bos.
Posteriormente, emprendí una práctica como artista visual independiente. En ese momento pinté principalmente retratos por encargo, hice ilustraciones y de vez en cuando trabajos de grandes dimensiones. En 1991 nos mudamos a Dordrecht. Allí comenzó una colaboración con “De Portretwinkel” (La tienda de retratos”) en Haarlem de 1996 a 2005. El período posterior, de 2005 a 2013, colaboré con Galería “De Twee Pauwen” (“Los Dos Pavos Reales”) en La Haya. En ese momento expuse 'bodegones de la naturaleza' en Holanda y en el extranjero.
Además, desde 2005 Galería/Taller Jan van 't Hoff está ubicada en el centro histórico de Dordrecht. Allí se puede visitar un espacio comercial en el que expongo permanentemente mis pinturas.
El dibujo y la pintura forman la base de mi trabajo visual. Principalmente a lápiz y óleo. En el pasado también trabajé con técnicas de aguafuerte y acuarela. Mi estilo de pintura está relacionado con el (post-)impresionismo holandés y el realismo clásico. El juego de luces y sombras y la representación de la tridimensionalidad en la superficie plana siempre me ha fascinado. Prefiero un enfoque artesanal del arte. Prefiero pintar personas y su entorno de vida en el sentido más amplio de la palabra, pero también temas de la Biblia.
Elección en mi adolescencia
Ya tomé la decisión de dibujar y pintar profesionalmente en mi juventud; hubo un tiempo en mi adolescencia cuando me di cuenta claramente, que me habían dado talentos para usarlos para la gloria de Dios.
"Mi vocación y deseo es alabar con imágenes a ‘Aquel que nos llamó de las tinieblas a su luz admirable' (1 Pedro 2, v. 9)".
Dios se revela en la creación y en Su Palabra, la Biblia. Tanto la "revelación de la creación", como la "revelación del Verbo" hablan, aunque de manera diferente, de Dios. (Romanos 1, v. 20) Conocer a Dios por Su Palabra determina mi visión de la creación.
Inspiración
Ya sea que me toque algo o alguien del mundo que me rodea, o un texto de la Biblia, casi siempre tiene una relación directa con la fe. Por lo tanto, los temas pueden variar desde una hoja o una fruta de otoño hasta una pintura narrativa sobre Noé.
Lo uno no está separado de lo otro. No solo las obras de Dios, sino también las acciones humanas son visibles en la creación. Como ser humano, experimento las consecuencias del pecado todos los días.
Hablar o pintar sobre la grandeza de las obras de Dios en el contexto de la maldad del hombre y la creación es lo que practico.
"El factor decisivo es que Cristo intervino dando su vida. Como resultado, también hay restauración y esperanza de restauración/recreación. ¡Motivo de alabanza en el lenguaje visual!"
¡Que haya luz!
La luz juega un papel central en mi obra. Tanto lo visualmente observable, como la luz como metáfora. La primera palabra que Dios pronunció en la creación fue: “¡Hágase la luz!” En esa luz percibo y disfruto la creación. Esto también se aplica a la recreación.
Dios es luz. Vivir con sentido es gozar de Él y vivir en la luz, es decir, en libertad y amor.
El reto es difundir esa luz.
Retratar
De una forma u otra, retratar personas me fascina. ¿Quién es el hombre frente a mí? Cada persona es única. Me he dado cuenta de que un retrato pintado en la interacción social a menudo tiene la función de subrayar una determinada relación. Al hacer que alguien retrate o cuelgue su retrato, se expresa aprecio por esa persona. Creo que ese es un buen aspecto de la pintura de retratos.
