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La muerte de Esteban
Hechos 7:59-60
59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió.Texto completo de la biblia
Hechos 6 versículos 7 hasta 15 Hechos 7 versículos 54 hasta 60;
Hechos 8 versículo 1
7 Y crecía la palabra del Señor, y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén; también muchos de los sacerdotes obedecían a la fe.
Arresto de Esteban
8 Y Esteban, lleno de gracia y de poder, hacía grandes prodigios y señales entre el pueblo. 9 Entonces se levantaron unos de la sinagoga llamada de los libertos, y de los de Cirene, de Alejandría, de Cilicia y de Asia, disputando con Esteban. 10 Pero no podían resistir a la sabiduría y al Espíritu con que hablaba. 11 Entonces sobornaron a unos para que dijesen que le habían oído hablar palabras blasfemas contra Moisés y contra Dios. 12 Y soliviantaron al pueblo, a los ancianos y a los escribas; y arremetiendo, le arrebataron, y le trajeron al concilio. 13 Y pusieron testigos falsos que decían: Este hombre no cesa de hablar palabras blasfemas contra este lugar santo y contra la ley; 14 pues le hemos oído decir que ese Jesús de Nazaret destruirá este lugar, y cambiará las costumbres que nos dio Moisés. 15 Entonces todos los que estaban sentados en el concilio, al fijar los ojos en él, vieron su rostro como el rostro de un ángel.
54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió.
Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.
Hechos 8 versículo 1
7 Y crecía la palabra del Señor, y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén; también muchos de los sacerdotes obedecían a la fe.
Arresto de Esteban
8 Y Esteban, lleno de gracia y de poder, hacía grandes prodigios y señales entre el pueblo. 9 Entonces se levantaron unos de la sinagoga llamada de los libertos, y de los de Cirene, de Alejandría, de Cilicia y de Asia, disputando con Esteban. 10 Pero no podían resistir a la sabiduría y al Espíritu con que hablaba. 11 Entonces sobornaron a unos para que dijesen que le habían oído hablar palabras blasfemas contra Moisés y contra Dios. 12 Y soliviantaron al pueblo, a los ancianos y a los escribas; y arremetiendo, le arrebataron, y le trajeron al concilio. 13 Y pusieron testigos falsos que decían: Este hombre no cesa de hablar palabras blasfemas contra este lugar santo y contra la ley; 14 pues le hemos oído decir que ese Jesús de Nazaret destruirá este lugar, y cambiará las costumbres que nos dio Moisés. 15 Entonces todos los que estaban sentados en el concilio, al fijar los ojos en él, vieron su rostro como el rostro de un ángel.
54 Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él. 55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió.
Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.
Más sobre este cuadro
Gracias a la predicación de los apóstoles, la primera comunidad cristiana creció fuertemente. Esteban, uno de los siete diáconos, probablemente un judío de habla griega, se dirige en su predicación principalmente a los judíos de habla griega. Algunos de ellos se resisten y discuten con él. Afirman haber oído a Esteban pronunciar palabras blasfemas “contra Moisés y Dios”.
Esto causa conmoción. Esteban es llevado ante el Concilio (Sanedrín), y falsos testigos lo acusan de haber dicho que Jesús quería destruir el templo y cambiaría la ley de Moisés.
A Esteban se le permite defenderse y él pronuncia un largo discurso en el que demuestra a partir de la Biblia que:
- los israelitas desde el principio desobedecieron repetidamente la ley de Dios,
- el Altísimo no habita en templos hechos de mano,
- los israelitas resistieron al Espíritu Santo y mataron a los profetas.
Además, traicionaron y asesinaron al Justo (Jesús), de quien habían hablado todos los profetas.
Entonces el Concilio no tolera más las palabras de Esteban, y sin juzgarlo lo echan fuera de la ciudad. Lo condenan a muerte por lapidación.
Los testigos que llevan a cabo la lapidación ponen sus mantos a los pies de Saulo.
Saulo acepta de todo corazón la muerte de Esteban. Poco tiempo después él mismo llegará a la fe en Jesús.
Esteban muere con una oración en los labios por su fe en Jesucristo.
Su muerte muestra similitudes con la de Jesús:
- fue atacado a pesar de sus milagros.
- fue acusado de blasfemia.
- fue condenado injustamente.
- oró: 'Recibe mi espíritu'.
- oró por sus asesinos.
“Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han persiguido, también a vosotros os perseguirán”. Juan 15 versículo 20
El nombre Esteban significa 'corona'.
“Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida”. Apocalipsis 2 versículo 10.
Esto causa conmoción. Esteban es llevado ante el Concilio (Sanedrín), y falsos testigos lo acusan de haber dicho que Jesús quería destruir el templo y cambiaría la ley de Moisés.
A Esteban se le permite defenderse y él pronuncia un largo discurso en el que demuestra a partir de la Biblia que:
- los israelitas desde el principio desobedecieron repetidamente la ley de Dios,
- el Altísimo no habita en templos hechos de mano,
- los israelitas resistieron al Espíritu Santo y mataron a los profetas.
Además, traicionaron y asesinaron al Justo (Jesús), de quien habían hablado todos los profetas.
Entonces el Concilio no tolera más las palabras de Esteban, y sin juzgarlo lo echan fuera de la ciudad. Lo condenan a muerte por lapidación.
Los testigos que llevan a cabo la lapidación ponen sus mantos a los pies de Saulo.
Saulo acepta de todo corazón la muerte de Esteban. Poco tiempo después él mismo llegará a la fe en Jesús.
Esteban muere con una oración en los labios por su fe en Jesucristo.
Su muerte muestra similitudes con la de Jesús:
- fue atacado a pesar de sus milagros.
- fue acusado de blasfemia.
- fue condenado injustamente.
- oró: 'Recibe mi espíritu'.
- oró por sus asesinos.
“Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han persiguido, también a vosotros os perseguirán”. Juan 15 versículo 20
El nombre Esteban significa 'corona'.
“Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida”. Apocalipsis 2 versículo 10.